La Palma es un auténtico paraíso para la práctica del parapente, y una de sus principales zonas de vuelo está enclavada en el municipio de Puntallana. Situado en el nordeste de la isla, a escasos 10 kilómetros de su capital, Santa Cruz de La Palma, permite disfrutar de fantásticos vuelos con panorámicas increíbles, desde el mar hasta la cumbre, que descubren un paisaje esencialmente verde, rebosante de palmeras, plantaciones de plataneras y tierras de cultivo, que parece más hermoso desde el aire.