La Isla de La Palma es un destino único para profesionales y aficionados de la fotografía que encuentran en su diversidad de paisajes un lugar ideal para la creatividad. La luz de la Isla Bonita, sus parajes protegidos, su famoso Mar de nubes o cualquiera de los senderos que discurren entre sus volcanes son un preciado tesoro para capturar con el objetivo, convirtiendo cada instantánea en un recuerdo memorable.
Un Mar de Nubes y un pueblo en una cueva
Reconocida por la UNESCO como Reserva de la Biosfera, la isla de La Palma cuenta con fenómenos naturales únicos, como su famoso Mar de nubes, que se extiende como una alfombra por debajo de El Roque de los Muchachos. Los vientos alisios son los responsables de este fenómeno que puede fotografiarse en las Cumbres de la isla, que son muchas; desde el Bejenao o la carretera hacia La Cumbre, en El Paso, hasta El Roque de Los Muchachos, en Garafía.
Otro de los lugares únicos de la isla es el conocido pueblo de Porís de Candelaria, en el municipio de Tijarafe. Este conjunto de casas escondidas en una cueva presenta un desafío para los fotógrafos más expertos, ya que su acceso no es fácil. Para fotografiarlo lo ideal es situarse en la última curva del sendero por el que se accede o, una vez dentro de la cueva, buscar el enfoque dentro del enorme óvalo de roca donde está el Porís. Esta vista se logra estando muy cerca del fondo.
El Mirador de los Llanos del Jable y La Cumbrecita están muy cerca del Parque Nacional de La Caldera de Taburiente. Pertenecen al municipio de El Paso, y desde ahí se puede fotografiar el perfil montañoso de ese lado de la caldera.
Ruta de los Volcanes: Teneguía, San Antonio y Tajogaite
La naturaleza convirtió a La Palma en el centro de todas las miradas cuando erupcionó el nuevo volcán de La Palma en la zona conocida como Cumbre Vieja. A través de sus diferentes bocas, expulsó lava durante tres meses sobre los municipios de Los Llanos de Aridane, El Paso y Tazacorte. En el barrio de Las Manchas permanece el cráter, aún con azufre en su parte superior, de este espectacular volcán con una altura de 1.120 metros. Las empresas turísticas autorizadas pueden llevar a los fotógrafos muy cerca de esa zona. Las mejores imágenes pueden capturarse a lo largo de esta ruta.
El Faro de Fuencaliente y las Salinas de Fuencaliente están muy cerca de los volcanes de Teneguía y San Antonio. El mar y la lava volcánica conforman un paisaje en el que, sobre todo cerca de la costa, la sal y los distintos tonos de la lava muestran una ruta fotográfica que contrasta con el verdor del resto de la isla.
Bosques milenarios, laurisilva y cascadas de colores
Dentro de La Caldera de Taburiente todos los senderos, en los que el agua se filtra por las rocas cubriéndolas de musgo verde y bosques de pinares, conducen al Río de la Caldera. Se trata de un río que en su zona de menor caudal atraviesa rocas ferrosas con una fotografía inigualable de la impresionante Cascada de colores.
Los Tilos y su viaducto de agua se encuentran sobre el barranco de San Andrés y Sauces, con lo que las cascadas de hasta 30 metros y su bosque de laurisilva dan para un día entero de fotografías que son la delicia para quienes quieren retratar la naturaleza en todo su esplendor.
La laurisilva se encuentra también en el Cubo de la Galga, un barranco situado en la ladera nordeste de La Palma, entre los municipios de Puntallana y San Andrés. Otra buena opción es la Caldera del Agua en Villa de Garafía, debajo del Parque Cultural de la Zarza y la Zarcita.
Los Tajinastes en flor, en la zona del Roque de los Muchachos en las cumbres de Garafía tiene lugar sobre el mes de mayo-junio (coincidiendo casi con otro espectáculo no menos espectacular que es el florecimiento del codeso y de la retama y el retamón) promete un paisaje de otro mundo. Según se enfoque con la cámara el lugar parece distinto. Esta especie es autóctona de las Islas Canarias y florece con colores azules, violetas en sus conos, que apuntan al cielo para mostrar toda su belleza.
Con ello, el recorrido por los paisajes y municipios de La Isla Bonita ofrece mil y una imágenes únicas para la mirada de un fotógrafo.