Todos los secretos ocultos en Tindaya

Más allá de los grabados rupestres, ¿qué visitar en este lugar sagrado?

Contenido

Fuerteventura cuenta con su lugar sagrado. Un lugar lleno de magia y de misterio. La magia de saber que fue habitado por los “majos”, antiguos pobladores de la isla, y el misterio de no saber, con exactitud, qué significan los grabados con forma de pie que se han encontrado. Nos referimos a la montaña de Tindaya, una visita obligada si estás en Fuerteventura.
Ubicada en el noroeste, en el municipio de La Oliva, Tindaya es un espacio natural protegido de unos 400 metros de altitud, que destaca en el llano paisaje propio de la isla. En la cresta suroeste de Tindaya se encuentra un sendero que permite a los visitantes conocerla de cerca y apreciar la belleza de sus colores, que al atardecer se vuelven de un increíble tono rojizo y anaranjado. Todo el paisaje que rodea a esta montaña sagrada está impregnado de una enigmática atmósfera.

Contenido

La montaña sagrada de Tindaya tiene un especial interés histórico y arqueológico por la gran cantidad de grabados rupestres que alberga. Tindaya constituía un lugar sagrado para la población que habitaba la isla con anterioridad a la conquista de los castellanos, los majos, que esculpieron sobre ella más de 300 grabados podomorfos (con forma de pie). Pero ¿qué significado tenían estos grabados?, ¿por qué se concentran en una parte concreta de la montaña? La mayoría de los podomorfos miran a Tenerife y Gran Canaria, las islas más cercanas de mayor relieve. Precisamente, los días despejados se puede divisar desde la cima de Tindaya la silueta del Teide. A su vez, también se han hallado grabados podomorfos en Lanzarote orientados hacia la montaña de Tindaya, dato que constataría que la importancia religiosa y cultural de Tindaya en la época aborigen rebasó los límites de Fuerteventura.

Contenido

Se cree que los podomorfos tienen relación directa con los astros. Tindaya podría haber sido un gran reloj astronómico para determinar los solsticios y las fases lunares. Además, se trataría de un lugar sagrado donde realizaban rituales mágicos.

Contenido

La montaña de Tindaya fue declarada Bien de Interés Cultural. Además de su valor histórico, también ha sido reconocida como Monumento Natural y Punto de Interés Geológico. Tras dejarnos seducir por su misticismo y belleza, podemos dedicarnos a pasear por las tranquilas calles del pequeño pueblo de Tindaya, situado a los pies de la montaña sagrada. El silencio y la calma son la tónica habitual en esta localidad, por lo que es un lugar ideal para aquellos que buscan un sitio para evadirse y desconectar.
Si visitas Fuerteventura no puedes perderte este remanso de paz, con una atmósfera que destila magia. Sin duda, el entorno perfecto para cargar las pilas.