Qué hacer en Fuerteventura con niños

Grandes planes en Fuerteventura… para los más pequeños de la casa

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Fuerteventura es un paraíso natural en el que encontramos absolutamente todo lo que puede hacer feliz a un niño: hermosas playas paradisíacas repletas de pececillos, senderos fáciles para recorrer a pie o en bici y pueblecitos blancos en los que corretear por sus calles. Todo en una isla poco masificada, muy agradable para recorrer en familia sin tener que estar siempre con mil ojos. 

¿Dónde ir con niños en Fuerteventura? Para empezar, a todos estos lugares:

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Para las nuevas generaciones curtidas en lo tecnológico, adentrarse en un auténtico molino de viento puede ser toda una aventura. Hay que conducir hasta la bella localidad de Antigua, uno de los enclaves más pintorescos de la isla, para llegar hasta su molino blanco, en el que antiguamente se molía el cereal para obtener el gofio. Los más pequeños no solo podrán visitarlo y aprender los secretos de la maquinaria tradicional, que se conserva en perfecto estado, sino que podrán recorrer el centro de interpretación aledaño y conocer mejor la historia, usos y costumbres del campesinado local.

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Este parque acuático es una parada obligatoria para los viajeros con niños, que se lo pasarán en grande en sus numerosos toboganes y en las diversas atracciones pensadas para todos los públicos, empezando por una completa zona infantil. En el parque acuático de Corralejo encontramos desde una piscina de olas a un jacuzzi gigante, un río en el que navegar con flotador y un gran tobogán para los más valientes, por no hablar de una cueva oscura en la que navegar a ciegas, entre otras atracciones.

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Es uno de los grandes atractivos de Fuerteventura para adultos y niños, y no es para menos. Las dunas se encuentran en el Parque Natural de Corralejo, visita obligada donde los pequeños podrán recorrer las suaves y onduladas dunas haciendo la croqueta y rebozándose en sus arenas finas y limpias para, a continuación, darse un chapuzón en las aguas cristalinas de sus playas. Corretear por este espectacular entorno natural será para ellos como estar en pleno desierto, aunque con un valor añadido: aquí encontramos algunas de las mejores playas de Fuerteventura.

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Hay que conducir hasta el pequeño pueblo de Ajuy, que forma parte del Parque Rural de Betancuria, para acceder a estas cuevas que constituyen una de las atracciones más singulares de Fuerteventura. Junto a su playa de arena negra se encuentra esta cueva de acceso gratuito a la que se llega a través de un caminito habilitado para ello. Tiene una gran importancia geológica, ya que sus rocas son las más antiguas del archipiélago, y también se han encontrado fósiles marinos. Ya que estamos en Ajuy, siempre es una buena idea parar a comer en alguno de sus famosos restaurantes y ver el atardecer desde la playa.

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Tomar un ferry para visitar el cercano islote de Lobos, llamado así porque en su día vivía aquí una colonia de lobos marinos, es un buen plan para la familia y disfrutar una divertida jornada al sol. En este islote virgen y deshabitado encontramos playas y calas de ensueño con aguas de un color turquesa intenso, además de una ruta circular para recorrer la isla y alternar así los baños y el senderismo. Los más intrépidos podrán practicar también el snorkel y el paddle surf.

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Es uno de los zoológicos y jardines botánicos más grandes de las Islas Canarias, el lugar perfecto al que dedicar una jornada completa para disfrutar contemplando gran diversidad de animales como camellos (los más atrevidos podrán emprender un Camel Safari), papagayos, canguros, primates, elefantes, jirafas, hipopótamos y leones marinos, por poner solo algunos ejemplos de la variopinta fauna que puebla este lugar. A sus numerosos animales hay que sumar las especies vegetales, pues su cuidado Jardín Botánico es un lugar de visita obligada para los amantes de las plantas y la naturaleza.

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Surf, paddle surf, buceo, kitesurf, vela… Hay deportes acuáticos para todos los gustos, bolsillos, edades y niveles, desde principiantes a todos aquellos que prácticamente solo necesiten alquilar el material. Si la amplia oferta de actividades acuáticas que encontramos, sobre todo en la zona de Corralejo, no nos convence, siempre podemos optar por el paracaidismo, rutas en segway, a caballo, en moto acuática y un sinfín de propuestas para disfrutar de la isla de forma diferente. Una iniciación al buceo en familia puede ser una actividad muy emocionante antes o después de una jornada playera, y si nos quedan ganas de alquilar una bici y recorrer Fuerteventura…  ¡Adelante! Es el lugar perfecto para hacerlo sin peligro alguno.