Un repaso a los mejores miradores de la isla
Es difícil establecer un ranking sobre las mejores vistas de Gran Canaria, pues la isla es un despliegue de postales idílicas en cualquier rincón, desde playas de cuento hasta pintorescos pueblecitos pesqueros, una arquitectura singular, cuevas, montañas y senderos que recorren hermosos paisajes naturales. Pero, sin duda, uno de los principales atractivos para el viajero es la red de miradores, que no solo nos permiten contemplar la isla en todo su esplendor, sino también tomar esas instantáneas que irán directamente a Instagram y formarán parte de ese álbum de fotos que miraremos una y otra vez durante mucho tiempo. Pese a que la isla rebosa encanto y al final casi cualquier rincón parece una postal, estos son algunos de los miradores de visita obligada en Gran Canaria para disfrutar de unas vistas espectaculares. Pon tu cámara a punto y ¡a disfrutarlos!
Mirador del Balcón
El nombre lo dice todo sobre este espectacular enclave en el que vamos a sentirnos minúsculos ante la inmensidad de este paisaje. Colgado sobre un imponente acantilado, desde este mirador divisaremos la llamada “cola de dragón”, una sucesión de acantilados costeros cuya silueta nos recuerda al lomo de este animal mitológico. Circular por la carretera que lleva al mirador, con sus hermosos paisajes agrestes y la majestuosidad del entorno, es también toda una experiencia.
Mirador Degollada de Becerra
Una de las estampas más conocidas de Gran Canaria es la que se contempla en este mirador-centro de interpretación desde el que se pueden apreciar las vistas de la cuenca de Tejeda. El mirador, cuya altura es impresionante, se levanta sobre un antiguo volcán que fue en su día el centro de la isla.
Mirador del Roque Nublo
El Roque Nublo, un monolito volcánico de 80 metros de altura, es uno de los símbolos de Gran Canaria, y es además visita obligada para cualquier viajero que desee tocar la historia geológica con las manos. Rodeado de un paisaje en el que predomina el pino canario y otras especies propias de las cumbres de la isla, el Monumento Natural del Roque Nublo es frecuentemente visitado por turistas y población local, que llegan hasta él a través de un sencillo sendero. Además de ser el corazón de la isla y del Parque Rural del Nublo, forma parte del territorio declarado Reserva de la Biosfera de Gran Canaria. Imprescindible.
Mirador del Pico de los Pozos de la Nieve
Una visita a este lugar, junto al punto más alto de Gran Canaria situado a casi 2000 metros de altitud, es todo un regalo para los sentidos cuando el día está despejado (que, por otra parte, es prácticamente siempre en esta isla). Barrancos y distintos elementos volcánicos del paisaje con formas inclasificables, que nos invitan a fantasear mientras desconectamos de todo, y una frondosa vegetación, son algunos de los atributos de este lugar mágico al que se accede fácilmente en coche.
Mirador de Unamuno
El paso del escritor vasco por las Islas Canarias ha sido siempre un orgullo para sus habitantes. De su estancia en el archipiélago destaca su destierro en Fuerteventura durante la dictadura de Primo de Rivera, aunque mucho antes, en 1910, Unamuno ya había pasado un mes en la isla de Gran Canaria. Por este motivo, se abrió la Ruta de Unamuno en Gran Canaria y se construyó una escultura en homenaje al escritor, obra de Manolo González, que representa a Unamuno en una actitud contemplativa. Lo que observa el escritor es el paisaje espectacular de Artenara, del que él mismo dijo: “el espectáculo es imponente. Todas aquellas negras murallas de la gran caldera, con sus crestas, que parecen almenas, con sus roques enhiestos, ofrecen el aspecto de una visión dantesca”. Suyo es el famoso calificativo que describe este paisaje: “tempestad petrificada”. No se puede explicar mejor.
Mirador El Guriete
Hay que desplazarse hasta el Barranco de Tirajana para contemplar las fortalezas de Ansite, vinculadas a la conquista de Gran Canaria, y disfrutar de un envolvente paisaje abrupto con un palmeral verde de fondo. Este mirador se encuentra a pocos minutos en coche del pueblo de Santa Lucía de Tirajana, aunque también se puede llegar tanto a pie como en bici si disponemos de unas horas para hacer una excursión. El paisaje lo vale.
Mirador de Bandama
Tanto la caldera como el pico de Bandama son dos de los elementos naturales más singulares de la isla. El cono es además un elemento destacado del paisaje, visible desde gran distancia y con una magnífica panorámica desde su vértice; la caldera es de perfecta estructura y la convierte en una de las más bellas de Canarias.
