El Hierro se ha propuesto convertirse en la primera isla sostenible del mundo en un plazo de cuatro a ocho años. De momento va por buen camino.
El verano pasado, entre el 13 de julio y el 7 de agosto, El Hierro volvió a batir un récord en términos energéticos: durante 24 días seguidos su población al completo se abasteció únicamente de energías renovables, un récord mundial en territorios insulares cuyo abastecimiento energético se basa habitualmente en combustibles fósiles. Pero sus ambiciones sostenibles no se quedan ahí. El Hierro se ha propuesto ser energéticamente limpia y autónoma al 100% en un plazo de cuatro a ocho años, tal y como ha afirmado su presidente Alpidio Armas.
La cruzada verde de El Hierro comenzó en 1997, cuando la segunda menor de las Islas Canarias tras La Graciosa, Reserva de la Biosfera por la UNESCO desde el año 2000, estableció un Plan de Sostenibilidad que la situaba muy por delante de iniciativas europeas y mundiales: la autosuficiencia energética, un modelo turístico respetuoso con el territorio, la agricultura ecológica y políticas de residuos cero. En 2006 se realizó una revisión completa del plan que concluyó que en diez años se había cumplido el 82% de los objetivos.
Uno de los principales pilares en esta estrategia fue la construcción de la central hidroeólica de Gorona del Viento, inaugurada el 27 de junio de 2014, que abastece cerca del 60% de las necesidades de la isla. El Parque Eólico, que está participado por el Cabildo de El Hierro, Endesa, el ITC y el Gobierno de Canarias, costó en su día 82 millones de euros, y se construyó en el cráter vaciado de un volcán –El Hierro es la isla con mayor densidad de volcanes de Canarias, con más de 500 cráteres a cielo abierto–, que fue convertido en el depósito superior de agua. Por su parte, en las colinas que cobijan Valverde, la capital, donde siempre sopla el viento, se instalaron los aerogeneradores.
Gracias a Gorona, en 2017 la isla prescindió de 6.017 toneladas de diésel equivalentes a 40.000 barriles de petróleo y se ha convertido en un referente mundial en el desarrollo de energías renovables. Desde 2015, además, las emisiones de gas invernadero se han reducido en 40.000 toneladas. Para conseguir el siguiente objetivo, la autosuficiencia y sostenibilidad energética completa, se trabaja ya en una ampliación de la central que consistirá en la introducción de energía undimotriz (conseguida a raíz de la fuerza de las olas), fotovoltaica (con la instalación de paneles solares) y el uso de baterías para acumular los excedentes de producción que no se consuman.
“No se puede entender la voluntad sostenible de El Hierro, que emana directamente de sus habitantes, sin conocer la historia de Canarias. Durante mucho tiempo los habitantes se han visto obligados a emigrar, muchos de ellos a Latinoamérica, y se ha dado una dispersión de la población que en la actualidad ha desembocado en un apego al territorio, en una voluntad unánime de conservación del patrimonio natural”, explica Gonzalo Piernavieja, director de la división de Investigación y Desarrollo Tecnológico del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), una institución que lleva más de 20 años trabajando en la búsqueda de soluciones tecnológicas para maximizar la penetración de energías renovables en las Islas Canarias.
Piernavieja destaca además que Canarias en general y El Hierro en particular han podido convertirse en referentes en materia de sostenibilidad gracias, paradójicamente, a las particularidades de su modelo turístico. “Canarias es un territorio con 2,2 millones de habitantes que acoge cada año unos 15 millones de turistas, ¿cómo es posible que con semejantes cifras pueda ser sostenible? Muy sencillo. Las Islas Canarias reciben turistas de forma escalonada durante todo el año, de manera que no se dan avalanchas en verano como ocurre en Baleares u otros archipiélagos”. Esto significa que las islas más grandes están preparadas para recibir cada mes unos 300.000 turistas, lo que permite crear políticas de sostenibilidad que serían imposibles si esta cifra se concentrarse en apenas unas semanas cada año.
Movilidad sostenible
Gorona no es la única iniciativa que consolida a El Hierro como un referente en la materia. El Plan de Movilidad Sostenible de El Hierro es un ambicioso proyecto que establece, entre otras cosas, mejorar la frecuencia y cobertura del transporte público, facilitar la información sobre rutas y tarifas, mejorar el acceso para las personas mayores –se calcula que son alrededor del 30% de usuarios–, así como la creación de un programa piloto de coche compartido entre los empleados públicos con el objetivo de racionalizar el uso del transporte privado.
Otros aspectos que contempla esta iniciativa son la reducción de las licencias de taxi y el fomento del transporte público y los taxis compartidos para llegar a los principales centros turísticos y de ocio (senderos, atracciones turísticas, centros de visitantes, playas…). Se incluye, además, un plan detallado para impulsar no solo el uso de microbuses eléctricos en determinadas áreas de la isla, sino también para renovar la flota de coches y sustituirlos por vehículos eléctricos que se abastezcan a través de la central hidroeólica. En la actualidad, el Cabildo trabaja, además, en un proyecto para obtener biodiesel a partir de aceites vegetales usados recogidos en la propia isla.
Agricultura ecológica
En enero de 2010, coincidiendo con el décimo aniversario de la isla como Reserva de la Biosfera, el Cabildo presentó un documento en el que se comprometía a que la isla fuese 100% ecológica y autosuficiente en materia de agricultura, ganadería, pesca y alimentación en un plazo de ocho años. De hecho, hace ya varias décadas que es un referente en cuanto a la producción ecológica de determinados cultivos, como el plátano. Sin haber alcanzado la totalidad de los propósitos, El Hierro es, en la actualidad, la isla con mayor superficie calificada de producción ecológica, con 53 operadores registrados y 4.232 hectáreas (incluidos los pastos de la Dehesa).
Destaca también su firme apuesta por la permacultura, un sistema de diseño agrícola, social, político y económico basado en los patrones y las características del ecosistema natural, y cuenta con diversos proyectos en este ámbito. La Escuela de Permacultura PapaGaia es uno de ellos, un lugar de encuentro para todos aquellos interesados en la vida sostenible, la agroecología, el ecofeminismo y el arte.
Turismo sostenible
Sus paisajes volcánicos de increíble belleza, sus maravillosas zonas de baño, el clima agradable durante todo el año, y el encanto que emana de todos los rincones de esta pequeña y tranquila isla, hacen de El Hierro un enclave único en el mundo que atrae cada año a miles de turistas. Además, submarinistas de todos los rincones del planeta llegan a El Hierro para bucear en el Mar de las Calmas —una de las tres Reservas Marinas existentes en las Islas Canarias— y en otros puntos de la accidentada costa herreña, de aguas transparentes, multicolor flora marina y una fauna variada y única que incluye meros, viejas, morenas, peces trompeta, langostas e, incluso, mantas diablo y tiburones ballena.