ÚLTIMA HORA: Coronavirus (COVID-19) aquí
LagOmar lo tiene todo para ser el escenario de una película al más puro estilo Hollywood. Una historia que engancha, un protagonista carismático y un escenario en el que te encantaría perderte. Cada pincelada que compone LagOmar es un dato curioso, es historia reciente de Lanzarote y forma parte ya de su cultura y su folklore.
Rebobinemos lentamente para analizar estos tres elementos en sentido inverso: el escenario, el protagonista y la historia.
El escenario: “Un oasis en Nazaret, Lanzarote”
Su impresionante arquitectura, construida sobre una cantera volcánica, aprovecha los laberintos y cuevas naturales de este espacio para crear un oasis en Nazaret, Lanzarote.
Concebida por César Manrique, aunque diseñada por Jesús Soto, LagOmar se ha mantenido en constante evolución desde su construcción, incorporando poco a poco elementos que casaban perfectamente con su diseño inicial. Un espacio vivo que, aunque es fácil de identificar con otras localizaciones de la isla, como por ejemplo la propia Fundación de César Manrique, también tiene una marcada inspiración árabe.
Y es que LagOmar se disfruta en los detalles: sus vigas (aprovechadas de los restos de naufragios en la misma costa de Lanzarote), su iluminación, o incluso los jardines (que albergan especies como aloes, buganvillas, palmeras…).
Dentro de la edificación podemos diferenciar cuatro ambientes: el área de exposiciones, su popular bar (que descansa en el interior de una de sus cuevas más extraordinarias), la zona de restaurante y la casa.
Es visitable tanto de día como de noche. Durante el día, en horario de 10:00 a 18:00 podrás disfrutar de LagOmar al completo, y a partir de las 18:30 únicamente quedan activos el bar y el restaurante. Aunque este último horario ofrece un valor añadido, la vista de los jardines y cuevas que se encuentran a su alrededor es totalmente diferente. LagOmar gana un aire de misticismo y magia que nos hace sentir como en un cuento de “Las mil y una noches”.
El protagonista: “Omar Sharif”
Lanzarote ha sido siempre un escenario recurrente en la grabación de producciones de todo el mundo. En la Casa Amarilla, antiguo Cabildo de Arrecife, se puede disfrutar en la actualidad y de manera permanente una muestra de todas las películas rodadas hasta el momento en la isla. No es extraño entonces que, en los años setenta, el popular actor egipcio Omar Sharif (protagonista de películas como Doctor Zhivago o Lawrence de Arabia) viniese a Lanzarote para interpretar el papel de Nemo en el film “La Isla Misteriosa”, una historia basada en la novela de Julio Verne.
Cuenta la leyenda que fue entonces, mientras visitaba la isla, cuando conoció la Casa que aún, claro está, no se conocía como LagOmar y que quedaría bautizada bajo este nombre después de que pasase por sus manos, en un merecido gesto hacia al intérprete.
En ese momento, LagOmar era mucho menos extenso. El cambio llegaría más tarde gracias a quienes fueran sus dueños a partir de 1989, los arquitectos Beatriz van Hoff y Dominik von Boettinger, siempre asesorados por los artistas locales mencionados para respetar al máximo tanto la topografía como la arquitectura isleña.
La historia: “Una interesante partida de bridge”
Muchas son las versiones acerca de la pertenencia de LagOmar al legendario actor, algunas incluso ponen en duda la idea de que LagOmar perteneciera alguna vez a Omar Sharif. Pero la más popularizada, y la que se muestra durante la visita, es la que cuenta que, a sólo dos días de que el actor hubiese adquirido este maravilloso emplazamiento, San Benady, el propio promotor que se la vendiera, habría querido recuperarla de manera desesperada.
Sabiendo el amor de Omar por el juego, lo habría desafiado al bridge, ocultándole un pequeño detalle, Benady era campeón de Europa en este juego de cartas. Después de que la partida tuviera lugar ocurrió lo esperado, San Benady recuperó su antigua propiedad y Omar, bueno… siguió haciendo películas maravillosas.
De esta historia se ha dicho que nada es cierto y que fue una estratagema de Benady para promocionar la venta del resto de sus casas en Nazaret, bajo la ayuda cómplice de Omar Sharif. Sea como fuere, no hay documentación suficiente que permita contrastar los hechos, y cada especulación acerca de los mismos no sirve sino para contribuir al mito y alimentar la curiosidad de propios y extraños.
En la actualidad LagOmar es el escenario de importantes actividades de la agenda cultural de Lanzarote, se alquila para la celebración de eventos y también dispone de un área de alquiler de apartamentos. Pero, sobre todo, en el imaginario lanzaroteño LagOmar fue y siempre será el hogar de uno de sus actores más queridos, independientemente de lo que ocurriera aquella noche, en aquella partida de cartas.