Firgas

Una cascada en medio de un casco urbano histórico

En el norte de Gran Canaria se encuentra Firgas, un pequeño pueblo lleno de grandes encantos. El agua ha sido protagonista de su historia, como lo demuestra la cascada artificial de treinta metros de longitud que discurre por el paseo de Gran Canaria, en la antigua calle Real. El casco urbano, coqueto y de reducidas dimensiones, hace que caminar por sus calles sea un placer para todo aquel que se acerque a visitarlo.

Preciosas vistas del norte de Gran Canaria y calles con encanto

El centro neurálgico del pueblo es la plaza y la iglesia de San Roque. Desde el mirador de la primera se obtiene una de las mejores vistas del Atlántico y de todo el norte de Gran Canaria. Su viejo molino de agua, el más antiguo de los que quedan en uso en las Islas Canarias, ha sido rehabilitado para disfrute de los visitantes. Y si el paseo entre casas antiguas y calles decoradas de azulejos abre el apetito, se pueden degustar excelentes carnes a la brasa en muchos de sus asaderos.

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Sostenibilidad

- Nunca dejes residuos de ningún tipo en el entorno, incluidas las colillas. Los restos de comida contribuyen a la proliferación de roedores y gatos asilvestrados que suponen una grave amenaza para la fauna.
- No arrojes al mar objetos ni residuos de ningún tipo.
- Respeta a los animales, no los molestes ni los alimentes. Si ves algún ejemplar herido, puedes avisar en el teléfono de emergencias 112. Tampoco arranques flores o plantas.
- No recojas ni te lleves piedras o cualquier otro elemento del medio natural. Tampoco lo modifiques amontonándolas para realizar las tristemente famosas “torres”.
- Respeta y cuida el patrimonio histórico y cultural del lugar, así como los distintos elementos del mobiliario público (paneles informativos, barandillas, asientos, alumbrado…).